Arquitecto colaborador: Andrés Maiz, Helena Goncalves
Se nos encarga remodelar una casona de los años 40´s de 500 m2, para desarrollar un jardin infantil y sala cuna, con un programa educativo muy potente y diferenciador. El enfoque educativo toma aspectos de “High Scope” que fomenta el aprendizaje activo de los niños por medio del juego en rincones de actividades. También recoge elementos de “Reggio Emilia”, que es una tradición de origen italiano, donde la naturaleza y los materiales tienen un rol central. La madera toma un rol protagónico y los espacios educativos se convierten en verdaderas escenografías, que se modifican día a día para estimular la imaginación y provocar la originalidad de cada niña o niño.
Nuestra propuesta incorpora entonces, el cruce entre arquitectura, mobiliario y ambientación, que es lo que finalmente constituye la experiencia espacial que vive la comunidad educativa.