Arquitecto patrocinante: Rodrigo Rojas, Felipe Gutiérrez, Sandra Yurac
Arquitectos colaboradores: Andrés Maiz
Calculista: Bernardo Mondiglio
Memoria: El proyecto consiste en un condominio de 4 casas en un terreno con mucha pendiente, pero con gran vista panorámica. El terreno es adyacente a una hermosa quebrada, con una naturaleza exuberante y un afluente del Río Mapocho. Las vistas de las casas se abren a este verdadero oasis en el medio de la ciudad y comparten sus accesos por medio de un pasaje común, cubierto de adoquines para moldear las diversas pendientes que las van comunicando entre ellas, a la manera de una sábana de piedra.
El proyecto se enfrenta en base a volumenes muy simples que se van traslapando en tres dimensiones, de manera de generar continuidad visual y, al mismo tiempo, privacidad. Además, estos juegos volumétricos y volados, permiten un uso muy eficiente de la superficie máxima que se puede usar en el proyecto por razones municipales.